Tras el coronavirus, el turismo se enfrenta a una profunda crisis. Después de décadas de bonanza y de excesos exprimiendo un modelo fast food orientado al consumo rápido y masivo, la aglomeración y la falta de cuidado por el medio ambiente han sido algunas de las características habituales. Cada vez viajamos más pero, ¿podemos viajar mejor?
Barcelona se ha convertido en un referente mundial a nivel turístico y en uno de los destinos preferidos por millones de viajeros al año. Pero esta afluencia masiva ha desbordado a la ciudad, haciendo que ese impacto positivo haya derivado en problemas. Por ello se hace necesario buscar alternativas tan innovadoras como el turismo industrial
Desde hace unos años, se empezó a poner de moda un nuevo tipo de turismo que miraba con cierta melancolía hacia una época anterior dándole protagonismo a nuestros pueblos. El turismo rural supone una vuelta a las raíces, a la naturaleza y a lo auténtico postulándose como una alternativa muy interesante para devolverle la vida al campo